No… no raya en lo absurdo si aquel hombre que usa estas prendas
siente que es parte de él.
Aunque no lo crean,
pero desde que existen las drag queens, que data de la época victoriana,
hubo hombres que usaban lencería femenina para estar más a gusto con su forma
de ser.
Hoy
en día todo ha evolucionado, y en tiendas en línea podemos encontrar marcas de
ropa interior que se dedican a explotar este
mercado cada vez
es más liberal.
El encaje, las trasparencias, la
seda, el satén, diseños femeninos exclusivos para hombres, brillos, adornos y
demás, ya no es exclusivo para las mujeres, porque en este mundo se
elimina cada vez más la barrera de los estereotipos y las etiquetas, para
que cada persona viva con orgullo su identidad.
Algo que hay
que dejar claro, es que el uso de estas prendas no es exclusivo de hombres gays. Una minoría de hombres
heterosexuales, usan la lencería femenina por comodidad,
sensualidad y placer. ¡Aunque
muchos lo nieguen!
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